jueves, 5 de febrero de 2015

DE LO SUBJETIVO A LO OBJETIVO, Y VICEVERSA

Hola !! 

Ya han pasado unos meses desde la última vez que publiqué, y es porque he estado bastante atareado estudiando y practicando para mejorar mis habilidades de dibujo y pintura.

La verdad no es nada fácil estudiar,  practicar, y sacar tus propias conclusiones sobre la marcha para desarrollar las habilidades necesarias no sólo respecto del dibujo, sino también del manejo del color y otros parámetros que en suma, hacen que una obra luzca realmente profesional y de calidad, es decir, que realmente sea un trabajo serio y no algo improvisado.

Estudiar cada parte que compone a la obra por separado, profundizando en cada tema para luego sintetizarlo, y al final sumar todas las partes para verlo en su totalidad, y que cada parte, cada tema a su vez sea ejecutado en forma paralela, en unidad, variedad y armonía para dar forma a una obra, para mi, algo realmente hermoso.


En fin, en un último artículo publiqué una foto de mi primera pintura al óleo la cual no quedó como realmente hubiera querido.


Esta obra la realicé en paralelo con un profesor de pintura el cual desarrolló la misma obra pero a nivel mucho más profesional.

A partir de esto me pregunté si realmete podría hacer algo como el trabajo que mi profesor realizó.

En una de las clases posteriores que tomé con mi ex profesor de pintura, pude quedarme la obra que realizamos en la clase, el tema? , fue igualmente el tema de Xochimilco. Tomamos la misma fotografía de Xochimilco como base para realizar la pintura de la clase y sobre la marcha lo único que hice fue observar y tomar nota de que colores utilizaba, como combinaba los colores para cada sección, la manera en que utilizaba los pinceles para dar efectos específicos y como poco a poco iba tomando forma la obra.

Honestamente, el profesor es de lo mejor en cuanto a la calidad de sus obras, sin embargo, su experiencia pintando y el cómo aprendió a pintar era demasiado subjetiva, es decir, era totalmente obvio que él aprendió todo sobre la marcha, practicando y practicando de manera amatéur hasta convertirse en un profesional sólo mediante el método empírico.

Esto pude notarlo ya que cuando él combinaba los colores, lo hacía de una manera rápida e instantánea, no me decía toma nota!, o este color se prepara con estos porcentajes, no estudiabamos teoría del color y algunos otros aspectos por separado para después aplicarlo poco a poco sobre un lienzo, es decir, comenzar partir de un estudio más objetivo para despúes con la asimilación y la práctica continua, convertir el proceso en algo más intuitivo (subjetivo). 

Pues bien, esto no fue para nada así... al comenzar, lo primero que escuché del profesor fue: "sólo quiero que observes y veas como lo hago". Al escuchar esto mi mente estalló en confusión por dentro porque sabía dentro de mi que tenía que tomar nota respecto de lo que observaría, así que lo primero que se me ocurrió fue tomar hoja y pluma para anotar lo que más me fuera posible sobre la marcha. 

Sobre cada sección que él pintaba me decía: tomas este color con tantito de este y un poco de esto y pintas el cielo, tomas un tantito de este color que ya tenemos, le agregas este y este y pintas los cerros, y así sucesivamente para cada parte de la obra!, fue entonces que de inmediato recordé a un amigo que estudió gastronomía y que despúes de años de estudio y trabajo su proceso era exactamente el mismo que el de mi profesor. Cada vez que iba a desayunar a su casa un fin de semana o que tenía la oportunidad de comer en su casa, al verlo cocinar era lo mismo, tomaba un ingrediente tras otro sin medir nada, a ojo de buen cubero agregaba todo, ponía a hervir el agua a temperaturas específicas de manera intuitiva, y al final quedaba la comida exquisita!, como podía ser esto me preguntaba yo ! ?, pues bien exactamente lo mismo fue con mi profesor, al final quedó una obra fantástica de  la cual tomé nota y de la cual me encargué de transcribir hasta cierto punto de manera objetiva, para después intentarlo por mi cuenta.

Cuando anotaba lo que el profesor me decía, instantáneamente trataba de escribir lo que me decia en un tipo de fórmula para después poder aplicarlo. es decir, si el me decía le pones tantito de esto de inmediato anotaba el color con un porcentaje del 10%, si escuchaba le pones bastante de esto de inmediato asociaba un 70 u 80 % de ese color , si un color se preparaba con otros 3 colores, anotaba los tres colores en forma de suma asignándoles porcentajes específicos,  y a ese resultado le llamaba "color del cielo" o "color del  pasto". Este proceso lo realicé de manera continua y lo más rápido dque podía para anotar cada matiz, tono y a que parte y/o sección de la obra correspondían estos.

Despúes de dos meses de aquella clase, de haber estudiado y praticado un poco más el dibujo y modalidades de pintura, decidí retomar el óleo y repetir esta pintura guiándome de dos cosas:

1) La pintura que tengo en casa y que se realizó el día de la clase.
2) Las notas específicas tomadas de aquella clase.

El proceso?, simple!; observar el color de la pintura y seguir los pasos de las hojas.
Combinar los colores según lo decía la hoja y comparar el color con la pintura hasta obtener el matiz y/o tono adecuado para su posterior aplicación en el lienzo.
Este proceso lo realicé sección por sección de la obra, algunos matices los obtuve de inmediato, otros tardé en obtenerlos a pesar de las notas, y sobre la marcha iba corrigiendo y agregando cosas que fui notando, es decir, apliqué el conocimiento de las hojas tal cuál como estaba escrito y agregaba otras notas a aquellos colores que no pude obtener con la aplicación de lo escrito, porque fue ahí donde tuve que experimentar, agregar otros colores, hacer veladuras, oscurecer algunas partes, etc, y siempre tomando como base la pintura del profesor y las notas. 



XOCHIMILCO 
ÓLEO
SEGUNDO INTENTO DEL MISMO TEMA


Al final, las hojas originales de aquella clase quedaron rayadas , modificadas , con un nuevo proceso que yo mismo diseñé sobre la marcha para igualar lo que mi profesor había hecho y para mejorar lo que anteriormente yo habia hecho,  se originó una nueva obra que compartí con mi familia. y que fue de mi absoluto agrado y satisfacción por el esfuerzo, pero sobre todo,  aprendí que no importa el método de aprendizaje que cada uno en lo particular utilice, no importa si comienzas de manera objetiva o subjetiva, lo importante es poder observar ambas cosas dentro de lo que aprendes, de trasladar el proceso de un estado a otro, aunque al final de las cosas el alma siempre prefiera a la hermosa naturaleza subjetiva, de la vida.

Saludos!
GR 

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